Ana Guajardo. Illustration by Vivian Jones

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En septiembre, Ana Guajardo, una organizadora de los derechos de los inmigrantes y de los trabajadores del lado sureste, anunció que entraría en la carrera para reemplazar a la concejala del Distrito 10, Susan Sadlowski-Garza, que se retira después de dos mandatos. Guajardo, quien cofundó el Centro de Trabajadores Unidos en el sureste de la ciudad, anunció su candidatura en un mitin organizado por el congresista Jesús “Chuy” García, quien la respalda. Sadlowski-Garza tendrá un evento de recaudación de fondos para Guajardo este mes.

Guajardo le comentó al Weekly que algunos de los logros de los que se siente más orgullosa son conseguir contratos sindicales, ayudar a los trabajadores a recuperar millones en sueldos robados, lanzar cooperativas de trabajadores dirigidas por mujeres y organizar esfuerzos para proporcionar alimentos, renta y fondos a personas con dificultades durante la pandemia del COVID-19. Guajardo también es profesora adjunta de organización comunitaria en Loyola y ayudó a organizar grandes marchas por los derechos de los inmigrantes. Hasta la fecha, el único oponente de Guajardo es Óscar Sánchez (a quien el Weekly también entrevistó en esta edición).

Las elecciones municipales se llevarán a cabo el 28 de febrero de 2023.

¿Qué te motivó a postularte para concejala del Distrito 10? ¿Cuáles son tus antecedentes y experiencia?

Recuerdo que cuando vivía en la calle 91th y la avenida Burley, sentía amor y pasión por mi comunidad. Después de que mis padres decidieron mudarse del Distrito 10, siempre tuve la esperanza de regresar a la comunidad. Comencé a involucrarme en 2006 durante las marchas por los derechos de los inmigrantes, después de mi trabajo con el Sindicato Internacional de Empleados de Servicios (SEIU) Local 3, y al poco tiempo me mudé de regreso. En 2007, vi cómo la empresa Jays Potato Chips se declaró en bancarrota y dejó a sus trabajadores en la calle. Fue entonces cuando empecé a organizar y cofundé el Centro de Trabajadores Unidos con líderes increíbles y apasionados. 

Durante la campaña Bike-4-Justice, en la que recorrí más de 1,500 millas en bicicleta desde Monterrey, México, hasta Chicago, reflexioné mucho y busqué en mi interior y supe, una vez que llegué a nuestro centro comunitario, que tenía que hacer más, pero a otro nivel. Creo que soy la candidata indicada para el puesto y sé que todo lo que haga vendrá de mi amor y compasión por los residentes. He dedicado veinte años de mi vida a organizar políticas justas y humanas y a defender los derechos de los trabajadores marginados de bajos ingresos.

¿Qué raíces o conexión tienes con el Distrito 10?

Antes de nacer, mis padres vivían en la comunidad de Bush y cuando nací se mudaron a la calle 91st y la avenida Buffalo. Asistí a la Escuela Primaria J.N. Thorp. Años después me inscribí en la Guardia Nacional del Ejército de Illinois y recibí mi bachillerato en ciencias políticas de Chicago State University con otra concentración en administración de empresas, y asistí a la Universidad de Minnesota como MacArthur Scholar donde recibí una maestría en política pública.

Actualmente vivo en Vets Park (Slag Valley) en el sureste de Chicago. Antes de mudarme de nuevo al Distrito 10, trabajé por los derechos de los inmigrantes contra el proyecto de ley de inmigración Sensenbrenner, H.R. 4437, que penalizaba a todo aquel que prestara cualquier tipo de ayuda a los inmigrantes. Estuve muy involucrada en llenar autobuses del Distrito 10, del noroeste de Indiana y de los suburbios del sur para presionar a los funcionarios electos contra la legislación antiinmigrante y presionar por una reforma migratoria integral justa y humana. 

Poco después, ayudé a los trabajadores de la compañía Jays Potato Chip que despidió a más de 400 trabajadores que llevaban entre quince y cuarenta años trabajando en la planta. Gracias a este trabajo, decidimos crear una organización que se centrara en la protección de los derechos de nuestras comunidades y en ayuda laboral, migratoria y educativa. Inmediatamente después de formar la organización, fui nombrada por la junta directiva como directora ejecutiva voluntaria. Permanecí en ese puesto durante un año y medio antes de convertirme en personal asalariado. 

Trabajé como organizadora con SEIU ayudando al personal de limpieza a ganar un contrato sindical contra la compañía de limpieza más grande de Indianápolis, así como a restaurar a los trabajadores despedidos. Tomé el liderazgo en la aprobación de la Ley de Acceso al Ministerio Religioso en 2007 e introduje un proyecto de ley de cooperativas de trabajo en el Estado de Illinois que les otorga a las cooperativas la capacidad de registrarse como un negocio IWCA reconocido. Desempeñé un papel clave en la aprobación de una enmienda a la Ley de Colección de Sueldo Debido de Illinois. Introduje los programas de padres mentores en seis escuelas de nuestro distrito y designé más de 250,000 dólares a nuestra comunidad con el programa. Y a través de nuestro programa de participación cívica, hemos ayudado a más de 250 residentes a convertirse en ciudadanos.

¿Cuáles son los principales problemas que enfrentan los residentes del lado sureste que esperas abordar?

Empleo: He aprendido de primera mano que los residentes del sureste necesitan trabajos con buenos sueldos. Demasiados están desempleados o subempleados. Tenemos que fomentar trabajos dignos y garantizar que los que trabajan no sean víctimas de la discriminación o del robo de sueldo por parte de empleadores explotadores.

Seguridad pública: Como comunidad debemos crear una comprensión holística e invertir en seguridad pública para todos. Tenemos que tener en cuenta las causas fundamentales de la pobreza y sus consecuencias. Necesitamos nuevas estrategias que inviertan en soluciones a largo plazo, que generen confianza en nuestras comunidades y que den a los equipos de primeros auxilios el entrenamiento y los recursos necesarios para servir. 

Aire limpio y agua limpia: El Distrito 10 debe ser un lugar donde los residentes se sientan cómodos y seguros viviendo y jugando. Hay una gran cantidad de áreas hermosas, como William Powers State Recreation area y el Big Marsh Park. Tenemos que seguir rehabilitando nuestros terrenos abandonados y áreas industriales para proteger la salud de la comunidad y restaurar la diversidad ecológica de la zona. Me comprometeré activamente con la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) de Illinois y de los Estados Unidos para garantizar que nuestro vecindario aborde de forma proactiva los problemas de contaminación. También debemos asegurarnos de que, a medida que el desarrollo vuelve al sureste, se base en los principios de una economía ecológica que minimice el desperdicio.

Infraestructura y transporte: Tenemos que destinar más recursos a los parques públicos, las bibliotecas, las escuelas, etc. para garantizar que tengamos espacios seguros para que los residentes interactúen y fomenten el sentido de comunidad. También lucharé por mejorar el sistema de transporte en el sur de Chicago. 

La extensión de la Línea Roja puede ser un importante estímulo para la parte más lejana del lado sur pero sólo si nos aseguramos de que los residentes tengan acceso a las nuevas estaciones. También creo firmemente en la mejora de la infraestructura ciclista. Como ciclista que soy, sé que necesitamos mejorar nuestras carreteras para que sean adecuadas para los ciclistas, así como otras opciones de transporte con bajas emisiones de carbono, como las patinetas eléctricas, para que los residentes puedan tener con seguridad una variedad de opciones de transporte aparte de los automóviles. 

La vía verde de Burnham y su extensión son desarrollos emocionantes, pero quiero asegurarme de que el Distrito 10 esté conectado a opciones seguras de transporte no vehicular que proporcionen opciones recreativas aparte del desarrollo centrado en el automóvil que ha caracterizado al extremo sur. Además, me gustaría ver cómo podemos recuperar la idea de autobuses que el difunto director ejecutivo de la Cámara de Comercio de South Chicago, Neal Bonsako, tenía para transportar a la gente del lado sur al East Side y Hegewisch.

De “redlining” a “greenlining”: Aunque “redlining” fue una práctica discriminatoria con la que los bancos, las empresas, los intermediarios e incluso el gobierno les negaban sistemáticamente préstamos y otros servicios relacionados a ciertos barrios por la raza o etnia de sus residentes, actualmente esto es ilegal. Lamentablemente, el legado destructivo de la desinversión causada por el “redlining” sigue con nosotros hoy en día.

Propongo la idea de “greenlining” donde los prestamistas reemplazarían los viejos mapas de líneas rojas por mapas que ahora tienen una línea verde dibujada alrededor de las comunidades con minorías. Esta línea verde significaría su intención de invertir en y proporcionarles acceso a capital a los residentes y las empresas ubicadas ahí. Los prestamistas que se comprometan con estas prácticas podrán finalmente liberar a sus instituciones del estigma asociado con el redlining. Los prestamistas que practiquen y se comprometan al greenlining estarán en la vanguardia de la reimaginación, junto con todos nosotros, sobre lo que nuestros barrios pueden llegar a ser realmente con acceso a inversiones justas y equitativas. 

¿Qué tipo de interacciones o relación de trabajo haz tenido con la concejala Sue Garza?

A través de mi trabajo en el Centro de Trabajadores Unidos hemos trabajado con la concejala Susan Sadlowski-Garza en temas de inmigración como la redada de ICE en la pizzería Route 66, campañas laborales, talleres, la concientización para construir un centro comunitario y la dispersión de equipos de protección personal durante la pandemia de COVID-19. Además, ella conectó al Centro con los sindicatos que hasta el día de hoy han estado ayudando con mano de obra voluntaria en la construcción de nuestro centro comunitario.

¿Cómo ayudaría tu experiencia organizadora al distrito si eres elegida?

Doy prioridad a entablar relaciones con los líderes, los residentes, las partes interesadas y los aliados de base. Durante mis décadas de organización comunitaria, siempre he procurado que haya unidad entre todos. Todos debemos dejar de lado nuestras diferencias y trabajar juntos para mejorar nuestra comunidad. Sé por experiencia que las mejores decisiones se toman cuando hay muchas perspectivas sentadas en la mesa. Este trabajo me ha enseñado a ampliar la conversación y a involucrar a la gente para obtener el cambio, una herramienta que será importante para ayudarme a abogar por los residentes del distrito y de toda la ciudad cuando esté en el Concejo Municipal.

Como (una de) las zonas más alejadas de la ciudad, ¿cómo ayudarías a tus electores a sentirse incluidos en el gobierno?

Creo en la transparencia y la colaboración. Me encantaría ver reuniones y eventos en los que se escuche al mayor número posible de personas para tener una mejor comprensión de las necesidades de la comunidad y poder representarlas en el Ayuntamiento. 

También me comprometo a destinar una parte de los fondos del “menú” del distrito cada año para desarrollar presupuestos participativos. He visto cómo en proyectos anteriores se han encontrado necesidades que de otro modo podrían pasar desapercibidas por el Ayuntamiento y los concejales, como el deseo de tener monumentos en el barrio. También creo en ayudar a educar a los residentes para que sean votantes más informados y promover la democracia.

¿Cómo piensas abordar los problemas ambientales que han afectado a la zona?

Lo primero que tenemos que hacer es ser más proactivos que reactivos, por eso tenemos que informar a la gente de lo que se acerca y comunicarnos desde el principio con la EPA de Illinois y de Estados Unidos. Todo nuevo desarrollo debe cumplir las normas ambientales más actualizadas y estrictas para promover un desarrollo sostenible y ecológico a largo plazo.

Sé que la protección de nuestro medio ambiente y nuestra salud requiere asociaciones y colaboración. Mi experiencia como organizadora y defensora me ayudará a involucrar a una amplia gama de defensores y expertos. Tenemos que asegurarnos de que las empresas que vengan no dañen nuestro medio ambiente ni pongan en riesgo nuestra salud. Quiero involucrar a nuestras universidades locales para que ayuden a estudiar las altas tasas de enfermedades crónicas en el lado sureste y mejorar el ecosistema de salud para facilitar el acceso de nuestros residentes a los recursos de salud.

¿Qué opinas de la actual crisis migratoria y cómo responderías a ella como concejala?

Aunque la inmigración es un asunto federal, hay algunas cosas locales que nos afectan. Yo me encargaré de que las voces de nuestros hermanos y hermanas inmigrantes sean escuchadas en el Ayuntamiento y que sigamos siendo una ciudad santuario. También tengo planeado reunirme con nuestro departamento de policía para garantizar que la seguridad de los miembros de nuestra comunidad sea una prioridad. Pienso asegurarme de que nuestros aliados y socios realicen talleres para educar a los residentes sobre sus derechos. También trabajaré en la promoción del Comité de Respuesta Rápida para incluir a otros en asegurarnos de que podamos comunicarnos efectivamente cuando haya una situación grave como la presencia de ICE.

Actualización, 6 de octubre del 2022: Después del cierre de edición, esta nota fue actualizada para reflejar el apoyo de recaudación de fondos de Sadlowski-Garza.


Alma Campos es la editora de inmigración del Weekly.

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